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el buen diente
Los mejores restaurantes mexicanos según Latin America's 50 Best Restaurants
Por Gabriela Morales
Conoce los once restaurantes mexicanos que figuran en esta lista y las seis ciudades que los albergan. Un recorrido para los paladares más exigentes.
Los Latin America’s 50 Best Restaurants del 2021, Pasado y Futuro es un ranking de los mejores lugares para comer según expertos en la industria, que en esta ocasión celebran con su voto el talento culinario más destacado de América Latina mirando el pasado y el futuro de la gastronomía de la región —acciones como apoyar a la red de productores locales o rescatar recetas indígenas—, pues su proceso de calificación habitual, o mejor dicho, su experiencia de críticos-comensales, se vio obstaculizado por las restricciones sanitarias de los últimos 18 meses.
Ciudad de México: seis opciones para disfrutar
Este año, seis restaurantes de la capital del país entraron en la cotizada lista. Pujol (No. 4), de Enrique Olvera, y su destacado plato “mole madre, mole nuevo”, que ha estado en el menú por 24 años. Quintonil (No. 8), de Jorge Vallejo, es un festín mexicano diseñado desde una mirada muy personal. SUD 777 (No. 11), de Edgar Núñez Magaña, es un restaurante de gran ambiente que combina técnicas gastronómicas mundiales con la cocina vegetal mexicana. Rosetta (No. 26), de Elena Reygadas, se especializa en comida artesanal mexicana. Máximo Bistrot (No. 32), de Eduardo García, cambia el menú a diario fusionando técnicas clásicas europeas con ingredientes de los jardines y cultivos de la ciudad. Y por último, Nicos (No. 35), de Gerardo Vázquez Lugo, quien lleva a la mesa el patrimonio culinario del país con mucho estilo.
Monterrey: Pangea, alta cocina contemporánea
Pangea (No. 15), de Guillermo González Beristáin, es reconocido por combinar la sofisticación de la alta cocina francesa con sabores mexicanos y productos locales de la región. El platillo icónico es el cabrito braseado, dorado y deshuesado en salsa de cerveza Bocanegra —etiqueta artesanal del chef Beristáin— servido con puré de coliflor y adobo indígena huasteco. Pangea ha sido el restaurante destino de Monterrey desde su fundación en 1998 y ha formado parte de la lista por nueve años consecutivos.
Guadalajara: Alcalde, cocina franca
Una cocina franca y con los pies en la tierra, así es Alcalde (No. 31), del chef Francisco Ruano. El restaurante destaca por trasladar la gastronomía de la región de Jalisco a un menú sencillo y sin artificios que utiliza ingredientes locales y de temporada. Sólo sabor y cariño, según reza la carta presentación del chef. En el menú degustación de nueve tiempos destaca el venado en birria con puré de frijol y el helado de romero y teja de jamaica.
Cancún: Le Chique, cocina mexicana contemporánea
En Azul Beach Resort Riviera Cancún está Le Chique (No. 37), del chef Jonatan Gómez Luna, cocina avant-garde mexicana que propone una experiencia gastronómica multisensorial, inmersiva y sorprendente. Este restaurante explora técnicas moleculares de vanguardia para deconstruir y reinterpretar platillos mexicanos tradicionales. Así, el menú degustación está compuesto por creaciones modernistas con los sabores más reconocibles del país, donde nada es lo que parece en textura y forma. Entre los platillos más reconocidos está la lengua de res con mole negro y el gazpacho moreliano.
Un favorito de la Riviera Maya
Desafiando las nociones de cómo debe verse y sentirse la alta cocina, Le Chique garantiza un festín para todos los sentidos.
Crédito: Bernardo Buendía.
Valle de Guadalupe: Corazón de Tierra, cocina de origen
Corazón de Tierra (No. 40), del chef Diego Hernández Baquedano, es un renombrado proyecto gastronómico embajador de los ingredientes locales. La esencia del restaurante está en la sostenibilidad de su menú, el cual se basa en productos de su propio huerto, como hierbas, frutas, verduras y aceite de oliva, y otros que crecen en la zona, como la sal bajacaliforniana. Los favoritos son el tamal colado de acelga, la sopa de frijol y el panqué de nopal.
Toluca: Amaranta, cocina mexiquense contemporánea
Amaranta (No. 43), del chef Pablo Salas, es una cocina experimental que reinterpreta y moderniza las tradiciones culinarias del Estado de México. El menú degustación de siete tiempos se transforma cada dos meses, a exigencia de lo que inspiren las verduras, hierbas y flores comestibles cultivadas por su equipo. Bajo el concepto “de la granja a la mesa”, los platillos más destacados son el pecho de ternero al horno, braseado durante seis horas, y la trucha, también a las brasas, con ensalada de habas.
Desde 2013, Latin America’s 50 Best Restaurants celebra la gastronomía local a través de recomendaciones culinarias en un ranking anual de las mejores experiencias culinarias de nuestro continente.
Amaranta
Si además de un excelente sabor y presentación de los platillos buscas ingredientes frescos y orgánicos, este restaurante es para ti.
Crédito: Cortesía Amaranta.
