Javier Larragoiti, ingeniero químico, quería encontrar una opción para su padre diagnosticado con diabetes, ya que descubrió que las opciones de endulzantes en el mercado sólo contienen un 2% del ingrediente natural y el resto es glucosa pura. Después de investigar, en 2018 encontró el xilitol, que puede extraerse de los olotes de maíz.

¿Cómo se obtiene?

Residuos agrícolas como el olote están compuestos por tres fracciones; una de ellas, y la más abundante, es celulosa, con la que pueden hacerse biocombustibles y papel, entre otras cosas. 

Otra de las fracciones es la hemicelulosa; dentro de ella hay otra que se llama xilosa, que las personas no metabolizamos; para aprovecharla, se extrae su contenido del olote y se fermenta para convertirla en xilitol, en una proporción de siete a uno: siete kilos de olote dan un kilo de xilitol.