Los huaraches, son uno de los platillos típicos de nuestra gastronomía y los encontrarás en un sinfín de restaurantes y puestos de comida de México. Su nombre se deriva de “kwarachi”, original de la lengua indígena purépecha.
Los ingredientes de los huaraches han ido cambiando con los años y poco a poco se han creado diversos tipos de recetas, todas apelando a los nuevos gustos de las personas, como los huaraches vegetarianos, o usando ingredientes menos calóricos.
Carmelita Medina: la creadora de los huaraches
El origen de este famoso antojito se lo debemos a Carmelita Medina, mamá de un humilde hogar mexicano que, al verse en la necesidad de sostener a su familia, salió a la orilla del Canal de la Viga en la Ciudad de México a vender sopes y tlacoyos.
En su puesto de comida, doña Carmelita dominaba el manejo de la masa de maíz y le gustaba mantener contentos a sus clientes. Un día, un exigente comensal la desafió a hacer un tlacoyo mucho más grande y alargado.
Carmelita siguió elaborando los huaraches debido a su éxito y los bautizó con este nombre por su gran similitud con el calzado tradicional mexicano.
A diferencia del tlacoyo, la masa del huarache no tiene relleno y se fríe en manteca, se baña de salsa verde o roja y se le agrega crema y queso para acompañar.
Una tradición atemporal
La venta de comida informal es una de las principales fuentes de empleo en México. Crédito: Shutterstock.
Hoy en día, los ingredientes de los huaraches pueden variar. Se les puede agregar tinga de pollo, carnitas, nopales, chorizo o bien, continuar con la receta original de Carmelita Medina. ¡Todo es cuestión de gustos!