Bajo el lema de “lo fashion no es efímero”, la marca Carla Fernández fue fundada como una empresa ética y sostenible que promueve los procesos de producción responsables con el medio ambiente y, sobre todo, con el desarrollo económico de los artesanos textiles.
Para Fernández es sumamente importante destacar el trabajo de los artesanos y las comunidades indígenas que crean las prendas, pero en especial que se les pague de forma adecuada por la propiedad intelectual.