¿Sabías que la Paz, Baja California Sur, cuenta con más de 300 días de sol al año? Así que no importa cuándo decidas conocerla o volverla a visitar, este destino siempre está listo para recibirte. Su ubicación, dentro de una bahía protegida por el gobierno de México, la convierte en una de las playas más tranquilas y hermosas del país. Se encuentra en el Mar de Cortés, bautizado por Jacques Cousteau como “el acuario del mundo”.
Ya sea que busques aventuras sorprendentes, comida alucinante, majestuosos paisajes o sólo tirarte todo el día en la playa a leer un libro, La Paz es el destino que, sí o sí, debes incluir en tu bucket list.
La ciudad de La Paz es la capital del estado de Baja California Sur y un hermoso destino de playa que, en nuestra opinión, ha sido algo subestimado. Es un lugar donde conviven impresionantes recursos naturales y una ciudad acogedora, llena de cultura y coloridos murales callejeros por doquier.
Déjate sorprender por la exótica gastronomía de La Paz. Machaca de langosta, chorizo de pescado y albóndigas de marlín están entre los platillos favoritos.
Crédito: Javier Azuara.
La Paz tiene una ubicación estratégica —y bastante afortunada—, ya que desde su malecón se pueden admirar tanto amaneceres como atardeceres, un espectáculo poco común. Ahora bien, ¿cómo te caería ver el atardecer frente al mar mientras te deleitas con la gastronomía mediterránea que ofrece el restaurante SeaSide? También te recomendamos Capuchino, una gran opción vegana, y Dulce Romero, una panadería y restaurante que, además de pan exquisito, cuenta con su propio huerto orgánico.
Relájate a unos 25 kilómetros de allí, en la Playa Balandra, una visita obligada en La Paz. Es una playa imponente que se ha mantenido sin desarrollos turísticos, ideal para perderte en sus paisajes y nada más. Y hablando de eso, podrás presenciar un monolito natural formado por la erosión del océano: el hongo de Balandra, que sigue de pie después de cientos de años (y algo de ayuda local). Otras opciones para pasar el día en la playa son El Saltito, favorita de los locales, y Pichilingue, con oleajes tan tranquilos que puedes nadar como si estuvieras en una alberca.
Si lo que buscas es un lugar con un encanto auténtico, la bahía de La Ventana no tiene comparación. Se llega a través de estrechos caminos polvorientos, llenos de baches y enmarcados por una vegetación cactácea y playas tranquilas. No hay muchos megaresorts ni desarrollos ostentosos a la vista. A unas dos horas al norte de San José del Cabo, y a poco más de 40 minutos de La Paz, el pequeño pueblo de pescadores de El Sargento ofrece hoteles encantadores y restaurantes deliciosos, además de que es una parada esencial para los amantes de los deportes acuáticos como el surf y el kitesurf.
Si buscas emociones más tranquilas, en la playa de La Ventana puedes descansar en las aguas termales, ya que la actividad volcánica de esta área creó géiseres y manantiales que brotan de la tierra para ofrecerte una especie de spa 100% natural y orgánico.
Playas vírgenes, flora y fauna endémica y paisajes en los que el mar turquesa contrasta con el desierto. ¿Qué más puedes pedir? Crédito: Paulina Figueroa.
La Isla Espíritu Santo, rodeada por las aguas turquesas del golfo de California, es una atracción que sencillamente no te puedes perder. No hay carreteras, puentes o una población humana permanente, más allá de unos cuantos guardias y pescadores. Gracias al esfuerzo de la comunidad local, esta isla no sucumbió a los desarrollos multimillonarios de hoteles y casinos. Por fortuna, la UNESCO la declaró Patrimonio de la Humanidad desde 2005 y el gobierno de México, Parque Nacional desde 2007.
En palabras de los locales, “La Isla Espíritu Santo es una chulada de norte a sur”; sin embargo, algunas de sus mejores playas son El Candelero, con la arena más blanca de la isla, y Ensenada Grande, ideal para hacer snorquel por la cantidad de luz que penetra en el agua.
Para llegar, lo único que tienes que hacer es tomar un bote o yate (dependiendo de tu presupuesto) que salen todo el tiempo desde el malecón de La Paz.
La Paz: más que el nombre de este destino, una absoluta promesa.
La Paz y sus alrededores son un destino fantástico para quienes les gusta explorar, ya que las distancias son relativamente cortas y puedes recorrerlos de costa a costa con singular facilidad. Sin embargo, si decides quedarte en las cercanías de la ciudad, es probable que necesites unas vacaciones después de tus vacaciones, de tantas cosas que podrás hacer.