Después del agua, el café es la segunda bebida más consumida en el mundo. Actualmente, más de la mitad de su producción se elabora en el continente americano. Este es un breve homenaje al café colombiano, uno de nuestros favoritos.
La tradición cafetera de Colombia inició con la llegada de los jesuitas al país en el siglo XVIII. La temperatura, la altitud y la latitud fueron condiciones ideales para favorecer su producción. El café que se produce en aquella tierra se caracteriza por tener un sabor suave, así como un aroma y acidez equilibrada. Sólo es cuestión de saborear y dejarse transportar.
Iniciamos nuestro recorrido en la finca de Café San Alberto, en Quindío, a 300 kilómetros de Bogotá.
Aquí se produce el café más premiado del país, con más de 30 galardones internacionales.
Su elaboración requiere un proceso manual de cinco fases de selección de grano denominado la Quíntuple Selección.
No por nada se le conoce como “la realeza del café”.